Textos y fotografías: Diego Martín Chapay y Caro Maranguello

Hay una pregunta que insiste y configura el trazado de la luz: ¿Hace cuánto hubo un mundo habitado? Una pregunta que responden las evidencias espaciales  y  los objetos: automóviles cubiertos, jardines, monumentos de figuras mitológicas, animales de yeso descascarado, mediasombras y murales.

Las imágenes proponen entonces un recorrido por diferentes puntos de la ciudad, una cartografía espacial y temporal que señala los momentos en que alguien, cámara en manos, se detiene, enfrentándose, a los objetos, y les pregunta ¿hace cuánto hubo aquí  un mundo habitado? Y ellos responden, silenciosos, a través de leves signos: alzan un color agrisado, muestran las estrías del uso, ensombrecen las paredes, se esconden detrás de lo verde.

El mundo entonces se muestra y escamotea, a la vez, la mirada. Hay algo, en general, que no llegamos a ver, un indicio de otra cosa, un comienzo de respuesta. Algo que nos dice: por allí se fueron los últimos hombres que habitaron este planeta. Y vemos, entonces,  lo único que queda de ellos, sus sombras.

Las cosas de este mundo tienen un espesor particular, no hay cuerpo humano pero tampoco paisaje frondoso. No hay horizonte ni forma de caminar entre piedras reales: hay, en cambio, una suma de murales que remedan las montañas, los mares y los ríos, que respiran raro entre máquinas de trabajo y puertas de viviendas, pero así y todo, dan una clave. Por allí han de haberse ido los hombres y mujeres que habitaban estas casas, los perros y los chicos del último verano.

Caro Maranguello

Stehen: “estar de pie”

Estoy de pie, es decir, salgo del letargo, comienzo de nuevo a fotografiar. Me levanto y sigo camino.

Pienso la fotografía como una búsqueda constante de identificación con las cosas, los lugares, las formas y los colores. Me detengo en los objetos no terminados, no acabados, despintados, desprolijos, en las imágenes que no hay personas. La presencia de la mano del hombre en el espacio, la ausencia del mismo hombre, la no utilización de lo construido, la falta de interés  en el uso de las cosas, los lugares, las casas de verano que en invierno no cobijan a nadie.

Diego Chapay